- Si bien es cierto que el Real Madrid se impuso a la Roma en el total de la eliminatoria de 1/8 de Final de la Copa de Europa 2015/16 por un contundente 4-0, las sensaciones que se vivieron sobre el césped (especialmente en el partido de Vuelta de anoche en el Bernabéu) no reflejaron tal superioridad; más bien sacaron a la luz la definición ofensiva de unos y otros. Llamó la atención la poca fortuna que tuvieron los italianos ayer en una oportunidad pintiparada para haberle metido -más aún- el miedo en el cuerpo a los merengues. Hasta en cinco ocasiones los de Luciano Spalletti estuvieron mal en el mano a mano con el guardameta rival. Destacó en las filas romanas la vertiginosa velocidad del egipcio Mohamed Salah que, sin embargo, se contrarrestó con su negación de cara a gol. En la plantilla del Real Madrid sobresalieron su portero (que aún no sabe lo que es encajar un solo gol en esta Champions) y dos jugadores del centro del campo: Modric (con un gran dominio del balón y un entusiasmo futbolístico contagioso) y Casemiro (un auténtico robabalones que permite mayor libertad a sus compañeros) Aun así, incertidumbre para este Real Madrid que, aunque transmite más en esta competición, sigue teniendo importantes lagunas y carencias en su juego. Mención aparte merece la ovación más sincera de ayer por la noche en Madrid; se la llevó un Francesco Totti que, a sus 39 años de edad y totalmente fuera de forma (aunque con una imperecedera clase y un carisma eterno) cuenta con el respeto y la admiración de los buenos aficionados al fútbol.
